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Trabajadores del Futuro. Motivación en un Mundo Cambiante

En este artículo de nuestro blog hablamos sobre como el salario emocional se posiciona como un factor clave, eclipsando en muchos casos al salario bruto. ¿Cuál es tu opinión?

«el salario emocional se centra en satisfacer las necesidades emocionales y personales de los trabajadores, generando un ambiente laboral más positivo y comprometido»

En la actualidad, la gestión de equipos se enfrenta a desafíos sin precedentes, dado que las organizaciones conviven empleados de diversas generaciones, desde la del Baby Boom hasta la hiperconectada Generación Z. Este panorama se desarrolla en medio de una acelerada digitalización y nuevas formas de trabajo impuestas por la pandemia de Covid-19, transformando el tradicional espacio de trabajo en un entorno compartido con el hogar, conocido como teletrabajo.

En este contexto, surge la necesidad de adaptarse a las expectativas y motivaciones de los empleados del futuro. El salario emocional se posiciona como un factor clave, eclipsando en muchos casos al salario bruto

El salario emocional se ha convertido en un componente esencial para la motivación y retención de empleados en el panorama laboral actual. A diferencia del salario tradicional, el salario emocional se centra en satisfacer las necesidades emocionales y personales de los trabajadores, generando un ambiente laboral más positivo y comprometido.

Ejemplos Comunes de Salario Emocional en Empresas:

  1. Flexibilidad Horaria: Permitir a los empleados gestionar sus propios horarios para adaptarse a sus necesidades personales y familiares.
  2. Desarrollo Profesional: Ofrecer oportunidades de capacitación y crecimiento que contribuyan al desarrollo profesional y personal de los empleados.
  3. Reconocimiento y Feedback: Implementar programas de reconocimiento, donde los logros individuales y de equipo son celebrados y recompensados.
  4. Ambiente de Trabajo Positivo: Crear un entorno laboral agradable, que promueva la colaboración, la creatividad y el bienestar general de los empleados.
  5. Beneficios Extra: Beneficios adicionales, como seguro de salud, programas de bienestar, actividades sociales, y otros que mejoren la calidad de vida.
  6. Equilibrio Trabajo-Vida Personal: Establecer políticas que fomenten el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, como días de permiso, flexibilidad para cuidado de hijos, etc.
  7. Participación en Decisiones: Incluir a los empleados en procesos de toma de decisiones, permitiéndoles aportar ideas y contribuir al desarrollo de la empresa.
  8. Ambiente Inclusivo: Promover la diversidad e inclusión, creando un espacio donde todos los empleados se sientan valorados y respetados.

Estos ejemplos reflejan cómo las empresas están reconociendo la importancia de satisfacer las necesidades emocionales y personales de sus empleados para construir equipos más comprometidos y productivos. El salario emocional no solo mejora la satisfacción laboral, sino que también impacta positivamente en la retención de talento y en la reputación de la empresa hacia el mercado, los clientes, proveedores, instituciones, etc.